MEXICO, D. F., 31 de Marzo de 2014.- La propuesta en materia de telecomunicaciones enviada por la Presidencia al Congreso hace una semana se ha convertido en uno de los sucesos más comentados durante los últimos días. Inicialmente, la propuesta llamó nuestra atención porque el Departamento de prensa de presidencia reveló que las reformas incluidas en la nueva legislatura servirían para mejorar la calidad de los servicios de telefonía celular, así como el de transmisión de televisión abierta. Sin embargo, cuando el Congreso difundió el documento en su totalidad, descubrimos que el panorama propuesto podría dañar el libre acceso a Internet y la privacidad de los usuarios de los servicios de telecomunicaciones en México.
Básicamente, uno de los artículos de la Ley Secundaria de Telecomunicaciones otorga al gobierno la facultad de “Bloquear, inhibir o anular de manera temporal las señales de telecomunicaciones en eventos y lugares críticos para la seguridad pública y nacional a solicitud de las autoridades competentes”. En nuestro país, las autoridades solamente pueden actuar conforme a lo que está establecido expresamente en la ley orgánica correspondiente, a diferencia de otros países, en los que pueden hacer cualquier cosa que no esté expresamente prohibida. Afortunadamente para nosotros, esto quiere decir que no pueden recurrir a subterfugios legales.
En resumen, otras leyes otorgan a la autoridad el poder de determinar las situaciones que son “críticas para la seguridad pública”, por lo que podrían bloquear el acceso a Internet y a las redes sociales en cualquier momento y casi con cualquier pretexto, como sucedió recientemente en Turquía con el servicio de Twitter y YouTube.
PROTESTAS POR EL BLOQUEO DE TWITTER EN TURQUÍA
Además, la nueva ley permitiría a los proveedores de servicio de Internet disminuir libremente la “capacidad, velocidad o calidad” de la conexión a Internet, bajo la presunción de que únicamente lo harán para cubrir las “necesidades de los segmentos de mercado y clientes” y, como nuestra experiencia lo indica, nadie está más dispuesto a cubrir las necesidades de sus clientes que las empresas de telecomunicaciones. Esto podría reflejarse en que los paquetes de Internet empresariales no incluyan acceso a Netflix o, en un escenario extremo, a Facebook, de modo que el usuario tendría que pagar una cuota adicional para acceder, todo bajo el entendido de que, al ser una conexión para negocios, el acceso a estos servicios es innecesario.
Como mencionamos en nuestro artículo acerca de Netflix y el pago que realizó a Comcast, uno de los proveedores de Internet más grandes en Estados Unidos, este tipo de discriminación de contenido representa un peligro real para el principio de neutralidad de la red. Aunque, cuando tenemos en cuenta que el caso de Netflix dejó claro que incluso una compañía de ese tamaño está dispuesta a pagar una cuota, independientemente de que posteriormente haya expresado su desacuerdo, para que los usuarios obtengan una mejor conexión para acceder a su servicio, no resulta sorpresivo que TV Azteca, cuya empresa matriz también es dueña del ISP Iusacell y recientemente adquirió Blockbuster ―junto con todo su catálogo de contenido en video― y estrenó su servicio de streaming de video, Veo, haya elogiado la reforma en materia de telecomunicaciones, asegurando que todos ganamos con ella.
“Azteca siempre ha estado en favor de la competencia y hoy le da la bienvenida a una iniciativa que la incentiva y mejora; sabemos que la competencia nos obliga a ser mejores. Es tiempo de ponernos a trabajar por México y así lo haremos.”, aseguró la televisora en un comunicado.
EL ENTRETENIMIENTO ESTÁ EN LOS PRIMEROS LUGARES DE USO DE INTERNET
A final de cuentas, la propuesta será revisada por las comisiones de Radio, Televisión y Cinematografía; de Comunicaciones y Transportes, y de Estudios Legislativos antes de ser aprobada por el senado. Sin embargo, el peligro es presente y real, la intención ya fue revelada e incluso cuando la propuesta podría sonar descabellada y preocupante para la mayoría de los usuarios de Internet en nuestro país, no podemos olvidar que la reforma energética también causó un alto índice de preocupación entre un sector amplio de la población mexicana.
No estamos diciendo que la reforma sea completamente negativa; de hecho, hace una semana publicamos un artículo en el que detallamos algunos puntos que podrían garantizar una mejoría en los servicios de telecomunicaciones de nuestro país, sin embargo, todos deberíamos considerar las ventajas y desventajas que la nueva Ley de Telecomunicaciones podría tener en nuestra vida diaria.