León XIV, el conciliador.

-Será el Papa de los trabajadores, de los migrantes, de los científicos; del conocimiento: será el Papa de la paz-

Manuel Zepeda Ramos.

Hijo de migrantes -como lo somos todos los que habitamos en el continente americano, excepción hecha a las culturas originarias-, de madre española y Padre Francés, nacido en Chicago Illinois, EE. UU, en 1955, el 14 de septiembre: hace 69 años; Robert Francis Prevost Martínez, Cardenal nombrado por el Papa Francisco y publicado en el Consistorio del 30 de septiembre de 2023 de la Diaconía de Santa Mónica, es el nuevo Papa de todos los católicos del Mundo.

No es gratuito que haya escogido el nombre de León XIV, sustituto de León XIII, el Papa longevo -murió a los 93 años-, el 256 pontífice de finales del siglo XIX y de los primeros tres años del siglo XX: desde el 20 de febrero de 1878 hasta su muerte, el 20 de julio de 1903 -25 años en el Vaticano-, amante de la Ciencia, y la Astronomía, el Papa que abordó los derechos de los trabajadores y la justicia social, el que escribió 86 encíclicas promoviendo el diálogo con el Mundo moderno y el renacimiento cultural de la Iglesia; el Papa que, al igual que Francisco, está enterrado fuera del Vaticano, en la catedral de San Juan de Letrán, en Roma.

León XIV es, además de políglota -habla inglés, francés, italiano, español, latín-, es filósofo, teólogo y matemático quien, recién ordenado sacerdote partió hacia el Perú en 1985 para hacer una vida en Sudamérica de muchos años al servicio de las comunidades marginadas de aquel país, en Chiclayo, en donde se convirtió en obispo y en peruano, conservando las dos nacionalidades para continuar con su rica carrera al servicio de las personas hasta llevarlo, hoy, a ser León XIV, el nuevo Papa de los católicos que habitan la Tierra. Es pues, el segundo Papa del continente americano, nacido en Estados Unidos, pero también profundo conocedor de la manera de pensar de los que habitamos en Latino América.

Al rededor de las once de la mañana, el periodista Omar Zúñiga nos daba la primicia en Xalapa: hay humo blanco, nos dijo. pero no se sabe todavía quién es. El motivo lo supimos después en boca de Joaquín López Dóriga desde Roma: al ungirlo por todos los cardenales del Mundo que podían elegir y ser elegidos: León XIV empezó escribir el discurso en el momento que lo supo, de puño y letra, discurso que quería darlo antes de que otro cardenal anunciara ante la multitud reunida en la amplia plaza de Roma y al Mundo entero quienes, posesionados de los radios, televisores y miles de redes sociales que afortunadamente funcionan en los cinco continentes, esperábamos con ansias el anuncio esperado:

HABEMUS PAPAM.

Fue un discurso sencillo, legible para todo el mundo católico y no, en donde el nuevo Papa ponderó el trabajo pastoral constante, cotidiano e intenso para todos los habitantes de la Tierra, que León XIV habrá de iniciar cuanto antes. El punto climático de León XIV se hizo presente cuando, con la garganta cerrada por una profunda emoción evidente, mandó un saludo para toda la diócesis de Chiclayo, en el Perú, en donde sirvió y aprendió en su formación intensa y cotidiana, para llegar a donde está ahora, el sitio que tanto anhelan quienes emprenden una tarea de muchos años al servicio de su religión católica. Un grito de profunda alegría escuchamos todos los que estábamos viendo el multitudinario acto en la televisión, imaginándonos por supuesto el grito emitido por todos los habitantes del Planeta que también, como nosotros, presenciamos ese momento tan emotivo. Muchas banderas, mayoritariamente de los países del continente americano, se agitaban en las manos de los creyentes en la enrome plaza del Vaticano atestada de seres humanos celebrando el acontecimiento.

¡Larga vida a León XIV!

Hoy inicia un trabajo pastoral sin precedente, en la búsqueda incesante por la paz de un mundo convulso que requiere la reconciliación de los seres humanos que acá vivimos.

Los habitantes del Planeta habremos de salir de este trance tan difícil en la búsqueda de la paz y el entendimiento, en estos momentos de enorme tensión para la presencia del hombre sobre la Tierra.

Los niños y los jóvenes tienen derecho a vivir en territorios tranquilos, en donde construyamos, con ellos, el mundo promisorio que todos queremos.

¡Que así sea!

About José Juan Mendoza

Check Also

¿Militares en las calles hasta 2030? Víctor Torres López

+  Fortalecer la seguridad con enfoque civil. CIUDAD DE MEXICO; 22 de abril de 2025.- …

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *