+ El director general del Ceytech y coordinador estatal de TBC, Luis Guadalupe Morales Ángeles, encabezó una jornada de seguimiento en los círculos de estudio del programa estatal de alfabetización
+ Participan un total de 506 educandos en los círculos de estudio de “Chiapas Puede”
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas; 06 de mayo de 2025.- Con el firme compromiso de garantizar el derecho a la educación de jóvenes y personas adultas, autoridades del Colegio de Estudios Científicos y Tecnológicos del Estado de Chiapas (Cecytech) y Telebachillerato Comunitario Chiapas (TBC) realizaron una visita de seguimiento a los círculos de estudio del programa “Chiapas Puede”, en los planteles número 14 Jesús María Garza, en el municipio de Villaflores, y el 31 La Independencia, en La Concordia.
El recorrido fue encabezado por Luis Guadalupe Morales Ángeles, director general del Cecytech y coordinador estatal de los TBC, acompañado por el técnico docente del Instituto Chiapaneco de Educación para Jóvenes y Adultos (Icheja), Carmelo Méndez Nucamendi, quien da seguimiento al desarrollo de los círculos de estudio en ambos planteles.
En el Plantel 14, en Villaflores, se informó que 106 personas educadoras voluntarias (ALFA’s) atienden a igual número de educandos que ya cuentan con capacitación y material. Mientras que, en el Plantel 31, se reportó la participación de 96 ALFA’s y 400 educandos, quienes han iniciado actividades de alfabetización.
Durante la jornada, Morales Ángeles subrayó que esta labor responde a la iniciativa del gobernador Eduardo Ramírez Aguilar, quien impulsa el programa Chiapas Puede con el objetivo de hacer del acceso a la lectura y escritura una realidad para miles de personas, especialmente en comunidades con alto rezago.
“En Cecytech y TBC Chiapas, los círculos de estudio son una realidad: un reflejo del compromiso institucional con la transformación social, la inclusión educativa y la erradicación del analfabetismo en el estado”, señaló.
La jornada culminó con una convivencia en el Plantel 31 La Independencia, en La Concordia, donde autoridades, voluntariado y comunidad educativa compartieron experiencias y refrendaron su responsabilidad social como agentes del cambio.