+ Miden calidad del aire en Tuxtla Gutiérrez
TUXTLA GUTIÉRREZ, Chiapas; 22 de octubre de 2025.- El Instituto de Investigación en Gestión de Riesgos y Cambio Climático (IIGERCC), de la Universidad Autónoma de Ciencias y Artes de Chiapas (UNICACH), amplió este año su monitoreo de la calidad del aire en Tuxtla Gutiérrez, al operar una red en tres puntos estratégicos. Los resultados han sido entregados a las autoridades estatales y municipales, como un insumo para la toma de decisiones en materia de protección ambiental.
Este año, las mediciones se realizaron entre marzo y junio —temporada crítica por las quemas— en las zonas norte, oriente y poniente de la ciudad, lo que permitió detectar variaciones significativas en las concentraciones de contaminantes, explicó el investigador del IIGERCC Emmanuel Díaz Nigenda. “Hemos observado que, mientras el centro de la ciudad reporta niveles bajos, hay sectores como el norte u oriente donde las concentraciones superan las normas ambientales”, señaló.
El investigador subrayó que estos picos de contaminación, provocados principalmente por incendios y quema de pastizales, representan riesgos para la salud pública, especialmente para niños y personas mayores. Resultados que reflejan la necesidad urgente de ampliar el monitoreo y realizar estudios de caracterización de partículas, así como análisis meteorológicos más detallados.
Estos trabajos, iniciativa del Cuerpo Académico de Cambio Climático y Contaminación Atmosférica, involucran a estudiantes de la Licenciatura en Ciencias de la Tierra y de la Maestría en Gestión de Riesgos y Cambio Climático. Colabora, además, la Facultad de Ingeniería con estudiantes de Ingeniería Ambiental y particularmente con el apoyo de la investigadora Rebeca Isabel Martínez Salinas en el análisis de resultados en laboratorio.
La UNICACH ha realizado este tipo de monitoreos durante seis años, por lo que los especialistas han podido observar eventos contaminantes también en la temporada seca fría, de noviembre a febrero, cuando los fuertes vientos elevan polvo en la ciudad, señaló el también doctor en Ciencias de la Tierra Diaz Nigenda. Concluyó que este trabajo, no solo es pertinente ante la crisis ambiental, sino que también cumple con objetivos institucionales de investigación y vinculación social. Por ello, para 2026 se espera ampliar la red de monitoreo a un cuarto punto en la zona sur de la ciudad y fortalecer colaboraciones institucionales.