MEXICO, D.F., 18 de Mayo de 2014.- La liberación hace tres días del mayor Iván Reyna Muñoz, acusado de colaborar con grupos dedicados al tráfico de drogas y luego exonerado por falta de pruebas, fue la conclusión y muestra del sentido que tuvieron los casos más importantes que Marisela Morales Ibáñez tuvo bajo su responsabilidad como agente del Ministerio Público Federal, fiscal de asuntos especiales, subprocuradora y titular de la Procuraduría General de la República (PGR).
En casos como el Michoacanazo, la aprehensión de jefes militares y la Operación Limpieza se ejercitó acción penal contra alcaldes y otros servidores públicos, pero todos han sido declarados inocentes tras meses o años de encarcelamiento.
La ex procuradora y dos de sus más cercanos colaboradores, artífices de la integración de averiguaciones previas o la consignación de las mismas, José Cuitláhuac Salinas y el teniente coronel Abigail Vargas Tirado, no son siquiera investigados por haber falsificado pruebas en esos casos, indicaron funcionarios de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (Seido).